Danilo Chiapello | [email protected]
Se trata del polirubro Barrabas (F. Zuviría 6400) y el pub Kusturica (25 de Mayo 3500)
Danilo Chiapello | [email protected]
En las últimas horas dos comercios de la ciudad fueron blanco de la delincuencia que, una vez más, dejó en claro que no tiene límites en su accionar.
El primero de los hechos ocurrió en el polirubro Barrabas; que debe su nombre no por el citado en la Biblia, sino a un personaje de historieta, según narró Viviana, titular del comercio ubicado en Facundo Zuviría 6400.
* “El servicio de alarma nos llamó a las 5,30 así que tuvimos que salir urgente de casa. Cuando llegamos vimos que la reja estaba forzada y que habían roto el blíndex. Adentro había mercaderías tiradas por el suelo al igual que un perchero. Enseguida nos dimos cuenta que se habían llevado una caja donde había algo de dinero”, dijo la comerciante.
"La amargura que uno siente es tremenda”, dijo la comerciante.
“La policía después encontró la caja; la habían tirado en la calle. Pero la bronca que uno siente es tremenda. No puede ser que estos tipos (por los ladrones) tengan tanta impunidad para actuar”, se quejó.
Hartazgo
Más adelante Viviana demostró su hartazgo por los reiterados hechos delictivos que la tienen como víctima.
“El año pasado nos robaron tres veces y éste es el primer robo de este año. Así no podemos seguir. Todo esto te va generando un desgaste emocional muy importante. Además del tema económico. Porque ahora tengo que salir a reparar la reja y a comprar un blíndex, en algo que me llevará más de 30 mil pesos”, agregó.
Al momento de calificar la situación de avenida Facundo Zuviría respecto a la seguridad, la damnificada dijo que es “pésima”.
“Estamos muy mal en todo sentido. No solo los comercios, sino la gente que camina por la calle. Todos fuimos víctimas de robo en algún momento, como así también en las casas de familia. Uno ve que los patrulleros andan, pero es evidente que con eso solo no alcanza porque los delitos siguen ocurriendo”, culminó.
En la Recoleta santafesina
El otro siniestro se consumó en el corazón de la llamada Recoleta Santafesina, más precisamente en el pub Kusturica, situado en 25 de Mayo 3500.
Al igual que en el caso precedente, fue durante la madrugada cuando los malvivientes atacaron el lugar donde arrancaron una ventana con sus rejas.
Cumplido ese paso los ladrones ingresaron al local y arrasaron con cuanto objeto se les puso en su camino. “Se llevaron todo... no quedó nada”, dijo su dueña quien agregó que es el segundo robo que sufre en una semana.
En tanto trascendió los “amigos de lo ajeno” no solo hicieron de las suyas en el citado comercio, sino también en dos departamentos vecinos.
Uno de esos inmuebles fue desvalijado y en otro los rufianes se “instalaron” durante una semana, a sabiendas que sus propietarios se encontraban de vacaciones.