De la Redacción de El Litoral
Banfield le ganó un ascenso y Colón lo mandó al descenso. El sabalero empezó con el pie derecho y el Taladro arrancó torcido.
De la Redacción de El Litoral
El partido tiene su historia por varios aspectos, pero sobre todo por aquel famoso partido en Córdoba (la tarde de los penales), cuando definieron uno de los ascensos a la A, en 1993. Años más tarde, Colón se tomó revancha y lo mandó al descenso al Taladro, el día de la gran actuación de Fuertes (dos goles del Bichi y victoria por 3 a 0 en Peña y Arenales). Son condimentos que sirven para incrementar la expectativa entre dos equipos que no arrancaron de la misma manera (mientras Colón ganó, a Banfield lo goleó River).
Julio César Falcioni, el entrenador de Banfield, fue claro cuando priorizó la Sudamericana por encima del torneo local. Razones le sobran: su equipo le ganó a San Lorenzo el partido de ida (2-0) y deberá jugar el martes, la revancha. El torneo continental tiene la particularidad de la simple eliminación. Y además, está el incentivo económico. En cambio, el torneo local es largo (30 fechas), recién comienza y la situación de Banfield no es comprometedora. Se puede dar el gusto de decir que hoy la prioridad es la Copa Sudamericana, mucho más después de haberlo dejado “grogui” a San Lorenzo.
Se habló de un equipo alternativo para jugar con Colón, pero, a priori, hay una buena cantidad de jugadores que son habitualmente titulares. Habrá que ver si esto se define, porque al cierre de esta edición, Falcioni todavía no había confirmado el equipo. Y seguramente habrá algún retoque porque viene de perder por goleada con River, en lo que fue la última presentación (el choque con San Lorenzo fue anterior).
Pasemos a Colón. Primer partido, buena victoria y 20 minutos interesantes en el arranque. Eso fue lo que dejó el partido con Aldosivi en Mar del Plata. Por eso, Montero no dudó en repetir los mismos que le ganaron al Tiburón en la Feliz. El único movimiento importante se dará en el banco de suplentes, porque está recuperado Jorge Carranza, el arquero que se sumó como refuerzo, e irá al banco de suplentes.
En lo futbolístico, quizás todo apunte a mantener la solidez defensiva que mostró el equipo, sobre todo en el sector central con el buen entendimiento que demostraron Conti-Ortiz, intensificar lo de Bastía-Poblete, otro de los puntos altos en el rendimiento colectivo y tratar de mantener esa contundencia que tuvo con Blanco y con un contragolpe mortífero que le permitió, a Lagos, convertir el segundo gol en la noche marplatense.
Entre Bernardi (bien al principio, no tanto luego), Ledesma e Iván Torres (tiene que levantar), se basará el funcionamiento ofensivo del equipo. “Montero quiere que el equipo juegue bien, con mucha tenencia de pelota, pero como todo entrenador —y coincido—, lo primero que busca y quiere es ganar”, dijo Ismael Blanco, una de las figuras que tuvo el equipo en el Minella marplatense.
Con Falcioni de entrenador, se supone que Banfield tendrá orden y buen retroceso. Es lo que un técnico de sus características prioriza. Con Montero, Colón también aspira a mantener ese orden que en muchos pasajes ante Aldosivi pudo demostrar. A partir de eso, la lucha seguramente será ardua en el medio, para tratar de aportar buen manejo, control del juego y sorpresa para lastimar al rival en el sector defensivo.
Con Talleres, ¿viernes?
El debut de Colón como local sería, casi con seguridad, el viernes de la semana que viene, recibiendo a Talleres de Córdoba.
Es un hecho que este partido —hace casi quince años que no se enfrentan— no tendrá la posibilidad de contar con hinchas visitantes. De ser así, nadie discute que los cordobeses arrasarían con las entradas disponibles. Pero deberán verlo por TV, porque sólo ingresarán los hinchas de Colón.
Luego, Colón jugará en tierra cuyana ante San Martín de San Juan y se dice que este partido iría el lunes 26 de septiembre, cerrando la cuarta fecha.